Asignar una Unidad de Red a un móvil

Asignar en tu PC una unidad de red al almacenamiento de tu móvil es una operación sencilla, pero no inmediata. Esta opción te permite conectarte a tu móvil sin necesidad de usar un cable y pudiendo hacerlo a distancia a través de wifi, sin las limitaciones de una conexión Bluetooth.

Windows generalmente utiliza SAMBA (procolo SMB) para acceder a los recursos de red. Sin embargo lo hace únicamente por el puerto estándar (445) y no te permite configurar otro puerto distinto, lo que dependiendo del sistema operativo de tu móvil puede requerir una alternativa.

Si quieres acceder a la información de tu ipad o iphone puedes utilizar este mecanismo, SAMBA/SMB, con las limitaciones que impone Apple al acceso de los datos internos a cada aplicación.

Si quieres acceder a la información de tu móvil android continua aquí.

IPad o iPhone

Apple impone con IOS ciertas limitaciones en el acceso desde una aplicación a los datos de otra, por lo que no podrás acceder a toda la información de tu equipo, salvo que esté rooteado, pero al menos sí a las fotos y los videos.

Para poder acceder a tu información necesitamos configurar un servidor SAMBA (SMB) en tu equipo IOS. Para ello descarga desde el Apple Store la aplicación LAN drive SAMBA Server Client, de webrox. La aplicación es gratuita, aunque tiene la velocidad limitada. Si quieres una velocidad superior puedes hacer un upgrade desde dentro de la aplicación (actualmente por 3,99€). Por ahora nos vale con la versión gratuita.

Una vez instalada, la configuración es muy sencilla, en 3 pasos:

Servidor SMB IOS

    • Administrar el modo de acceso, eligiendo una de estas opciones:
        • Acceso anónimo con confirmación, no deberás introducir usuario o password, pero al conectar desde el PC, en el iPad o iPhone se te pedirá que confirmes que das acceso
        • Acceso anónimo (sin confirmación)
        • Usuario con password, pudiendo indicar además los permisos sobre las unidades compartidas.
    • Administrar los elementos compartidos. Si tu equipo no está rooteado las opciones no son muchas en el caso de IOS, dado que el sistema no permite a unas aplicaciones acceder a los datos de otras : DCIM (fotos y videos del equipo), Landrive (un espacio en que puedes coger y deja ficheros) y Developer (un área reservada para desarrolladores). Si tu equipo está rooteado podrás seleccionar otros paths.

Una vez definidos los elementos compartidos puedes explorarlos, usando la opcion Explorar que tienes abajo, o arrancar directamente el servidor SMB pulsando START,  para poder acceder desde el PC.

Una vez arrancado el servidor, lo siguiente es configurar el PC. Abre un explorador de archivos. En la parte de la izquierda selecciona Este Equipo, y dale al botón derecho del ratón y verás que aparece un menú, selecciona la opción Conectar a unidad de Red...

Añadir Unidad de RedY te saldrá una ventana en que podrás seleccionar la unidad que quieres asignar (en este caso Z:, pero puedes seleccionar cualquier letra que esté libre), y podrás indicar dónde encontrarla

Agregar Unidad de red

En el campo carpeta debes indicar la dirección del servidor SMB. Es la dirección que te aparece en la pantalla del iPhone o iPad, pudiendo darle a Examinar para dejar que el PC localice los recursos compartidos, o escribiendo directamente la ruta (Será la dirección del servidor que te aparece en la pantalla del iPad, en mi caso \\192.168.1.135, seguido de «\» y el nombre del recurso, es decir, p.e. \\192.168.1.135\DCIM). Una vez seleccionado te pedirá en el PC usuario y password, te pedirá confirmación en el iPad, o se conectará directamente, en función de la opción de acceso que elegiste.

Ya tienes tu unidad de red disponible para navegar por ella. Cuando acabes, recuerda apagar el servidor SAMBA (de manera que nadie pueda acceder al contenido de tu teléfono). Antes de apagarlo es conveniente que desconectes la unidad de red de tu PC, para ello selecciona en el explorador de archivos Este Equipo dale al botón derecho del ratón y selecciona Desconectar Unidad de Red.

Android

El problema con tu móvil Android es que si no lo has rooteado  (normal, yo tampoco), aunque instales un servidor SAMBA no podrás configurarlo en el puerto estándar. Y si configuras otro puerto, Windows no podrá acceder a él (sí podrías a través de algún programa cliente, pero así no podrás asignarle una unidad de red).

Para resolver el problema vamos a utilizar otro protocolo que sí funcione entre tu móvil Android y Windows: wevDAV.

Hay varios servidores de webDAV disponibles en la PlayStore. Yo he usado una gratuita que me ha ido bien: Servidor WevDAV, de The Olive Tree.

Descárga e instala la aplicación desde la Play Store. Antes de darle al botón de encender que verás en medio de la pantalla, dale a la llave que verás en la esquina superior derecha.

WebDAV server Off

Verás que puedes configurar varios elementos:

  • Interfaz de red: déjalo en Wifi (el ordenador podrá acceder al móvil siempre que se encuentre en la misma red, en este caso la de tu casa, vía wifi para el móvil y por cable o wifi para el ordenador)
  • Puerto, puedes dejar el 8080 que viene por defecto, o elegir otro cualquiera (superior a 1024)
  • Usar contraseña, yo he tenido algún problema de conexión configurando un usuario (no para acceder desde una navegador, pero sí para asignar una unidad de red), así es que finalmente he optado por dejarlo sin marcar, de manera que no solicite usuario y password (esto lo hace menos seguro, por lo que enciende el servidor WebDAV únicamente cuando vayas a utilizarlo).
  • Directorio raiz, aquí vas a elegir qué directorio del móvil será visible desde fuera. Elige sdcard si quieres acceder a la memoria interna del móvil (sí, ya sé, el nombre no es lo que parece), SdCard Ext. si quieres acceder a la tarjeta SD externa, o puedes también escoger DCIM (para las videos y fotos en su directorio por defecto o una carpeta personalizada.

No selecciones  el directorio raiz, Root (/), aunque quizás haya sido tu primera tentación, para acceder a todo. Hay varias razones, pero la principal es que algunos de los directorios están linkados de manera que aparecen varias veces, con todo su contenido. P.e. /mnt/sdcard está linkado con /sdcard, por lo que aparecerá el espacio multiplicado y a la hora de ver duplicados nos identificará como duplicados todos los ficheros, cuando en realidad no lo están (cada fichero es único, pero está linkado en 2 ubicaciones, si lo borráramos de una carpeta desaparecería de las 2 carpetas). Aún peor es el hecho de que algunas carpetas están linkadas de manera recursiva (esto me ha pasado especialmente en /proc. P.e., dentro de /proc/self/task/30983/cwd/ estaba de nuevo el directorio /proc), por lo que el proceso de detectar carpetas se convierte en un proceso casi infinito, hasta que el ordenador da un error por falta de memoria o por ser los paths de los directorios demasiado largos.

El resto de opciones las puedes dejar como vienen, aunque es recomendable dejar marcada la opción de Mostrar detalles del servidor. Ahora dale a Volver para regresar a la página principal y ya puedes darle al botón de encender, que se pondrá de color verde.

Vete ahora al PC y abre un explorador de archivos. En la parte de la izquierda selecciona Este Equipo, y dale al botón derecho del ratón y verás que aparece un menú, selecciona la opción Conectar a unidad de Red...

Añadir Unidad de RedY te saldrá una ventana en que podrás seleccionar la unidad que quieres asignar (en este caso Z:, pero puedes seleccionar cualquier letra que esté libre), y podrás indicar dónde encontrarla

Agregar Unidad de red

En el campo carpeta debes indicar la dirección del servidor WebDAV, es la dirección que te aparece en la pantalla del móvil (si marcaste la opción Mostrar Detalles del Servidor), algo del tipo https://192.168.1.132:8080, como en la imagen

WebDAV Server On

Dale a finalizar y ya lo tienes, la unidad de disco Z: de tu ordenador será el directorio que hayas seleccionado de tu móvil.

Recuerda apagar el servidor webDAV cuando no lo uses (de manera que nadie pueda acceder al contenido de tu teléfono). Antes de apagarlo es conveniente que desconectes la unidad de red de tu PC, para ello selecciona en el explorador de archivos Este Equipo dale al botón derecho del ratón y selecciona Desconectar Unidad de Red.

 

Descarga Duplica2, Tutorial

Descarga Duplica2

Descarga aquí la última versión (v1.2) de Duplica2.                                                     (english )
Al descargarlo directamente de internet puede que Windows «proteste» y te pida confirmación para abrirlo. Hazlo con confianza, el programa ha sido desarrollado directamente por nosotros y no contiene conexiones a internet ni ningún elemento peligroso.

Este programa es de desarrollo propio y se ofrece AS-IS, sin incluir garantía o soporte que no se haya contratado específicamente.

Licencia

Puedes descargar gratuitamente Duplica2 y usar el programa para hacer el catálogo de tus discos/carpetas, gestionar el catálogo (comparación, búsqueda, ocupación)  y localizar ficheros duplicados.

Adicionalmente, hasta el 20 de Mayo de 2020 tienes una licencia temporal gratuita para usar todas las funcionalidad de  gestión de duplicados (visualización, borrado por carpetas y borrado fichero a fichero)

Si quieres una licencia Premium para tu equipo puedes solicitarla en jardindeljubilado@gmail.com, con un coste de 5.

La licencia te permite el uso del programa con toda su funcionalidad en la versión actual y en todas sus releases menores (correctivas, v1.xx). La licencia da derecho al uso del programa AS-IS.

Manual de usuario

Duplica2 es una aplicación creada específicamente para gestionar los ficheros duplicados en tu/s disco/s.

Adicionalmente te permitirá:

    • Visualizar la ocupación de un disco o directorio, permitiéndote saber cuánto ocupa cada carpeta o qué carpetas o ficheros están llenando el espacio. También podrás ves la ocupación por tipo de fichero.
    • Encontrar un fichero o carpeta en un disco o directorio, pudiendo usar comodines (p.e. ficheros cuyo nombre contenga «libro», como «elLibroGordo.doc»).
    • Comparar el contenido de un disco o directorio con el contenido que tenía en otro momento, pudiendo archivar «instantaneas» del catálogo de contenidos de cualquier disco. Puedes hacer la comparación incluso aunque no esté disponible (el pendrive, disco USB, móvil o disco de red) en el momento de compararlo.
    • Comparar un disco o carpeta con el disco o carpeta donde guardas su copia de seguridad, para verificar que el contenido es correcto: identificar ficheros que faltan o sobran, o ver ficheros que son diferentes en tamaño o fecha.

Al ejecutar el programa te aparecerá la pantalla principal, que como puedes ver está dividida en 3 secciones horizontales:

      • Gestión de Catálogos
      • Detección de Duplicados
      • Gestión de Duplicados

Gestión Duplicados y Discos

Catálogos

Un catálogo contiene información de la estructura de carpetas de un disco o carpeta y de todos los ficheros que contiene (incluyendo información de su nombre, ubicación, tamaño y fecha de última modificación). Es el elemento en que se basan todas las operativas.

Para crear un catálogo, selecciona en la lista de la izquierda, en la sección superior, el disco que deseas escanear (puedes hacer doble click y bajar a otra carpeta si no quieres hacer el catálogo del disco completo sino sólo de una parte).

Si quieres hacer el catálogo del contenido de un móvil, verás que no aparece en la lista de unidades, aunque lo conectes por USB. No te preocupes, tiene solución y podrás acceder tanto a la memoria interna del móvil como a la tarjeta SD. Para ello debes asignar una unidad de red en Windows al móvil (es decir, que su contenido te aparezca como una unidad de red). Ten cuidado de seleccionar de la tarjeta o la memoria interna. No selecciones en la carpeta raiz de un móvil Android dado que te dará falsos duplicados (al haber carpetas enlazadas)

Aquí te explico cómo

Una vez seleccionado el disco o carpeta del que quieres obtener el catálogo, haz click en el botón Catalogar. Verás que en la barra de estado (en la parte inferior de la ventana) te va informando de los elementos que va añadiendo al catálogo. El proceso puede tardar unos segundos o unos minutos, dependiendo del tamaño del disco  o carpeta a escanear, del tipo de disco (disco SSD, pendrive, hard disk,…) o si es un disco local o un disco de red.

Cuando el proceso de catalogación finalice verás que aparece un nuevo elemento en la lista de la derecha, indicando qué has catalogado, cuando empezó el proceso y en qué momento ha finalizado. Se te indica también el número de carpetas que se han encontrado y cuantos ficheros se han catalogado. Si el programa no tenía permisos para acceder a alguna carpeta te saldrá un mensaje de aviso (informando los directorios o ficheros que no han sido incorporados al catálogo -tampoco se incluye la papelera-).

Si seleccionas un catálogo de la lista se mostrará a la derecha, en azul, cual es el tamaño total de los ficheros que contiene, en Bytes, KiloBytes (KB), MegaBytes (MB) o GigaBytes (GB).

Adicionalmente se mostrarán en las listas de debajo, a la izquierda la lista de los (25) ficheros más grandes que se han encontrado en el catálogo indicando su tamaño, y a su derecha la lista de los principales duplicados que se han encontrado y cuánto ocupan (estos duplicados son ficheros que tienen el mismo nombre y extensión y el mismo tamaño, pudiendo ser sus fechas iguales o distintas).

Buscar duplicados

Hay varios criterios para identificar si 2 ficheros están duplicados o no. El más restrictivo sería que tengan el mismo nombre, el mismo tamaño, la misma fecha y que el contenido dentro del fichero sea exactamente el mismo, byte a byte. Analizar el contenido de todos los ficheros del disco o carpeta byte a byte supone una carga muy importante (para el ordenador, para el disco y para el tiempo del usuario), por lo que en un primer paso no se mira dentro de los ficheros (se da la opción más tarde, para un número menor de ficheros) y las opciones que se te ofrecen de partida son:

    • Que tengan el mismo nombre, el mismo tamaño y la misma fecha de modificación (recuerda que en esta fase no se mira el contenido de los ficheros, por lo que no hay la garantía absoluta de que sean idénticos, pero parece muy probable).
    • Que tengan el mismo nombre y el mismo tamaño, aunque la fecha de modificación sea distinta (puede ser p.e. porque se haya abierto el fichero y vuelto a grabar sin cambiarlo, o puede que sí se haya cambiado, pero sin modificar su tamaño, p.e. si es de texto cambiando «obserbar» por «observar»). Esta comprobación suele ser suficientemente fiable para imágenes o vídeos, pero en otros documentos debes asegurar que sabes qué estás haciendo.
    • Qué tengan el mismo nombre, aunque el tamaño o la fecha sean distintos. Ten en cuenta que si 2 ficheros tienen distinto tamaño es seguro que su contenido es distinto, por lo que sólo deberías utilizar esta opción en casos concretos o para localizar versiones del fichero que tengan el mismo nombre.

La búsqueda de duplicados la puedes hacer dentro de un catálogo, o teniendo en cuenta 2 catálogos (para buscar duplicados entre ellos y dentro de cada uno).

El primer paso es seleccionar el catálogo o catálogos a contemplar. Si quieres seleccionar 2 catálogos haz click sobre el primero y pulsando la tecla CTRL haz click sobre el segundo.

A continuación, en la sección de en medio selecciona el criterios de búsqueda de duplicados y haz click en el botón Buscar Dups. El ordenador buscará los duplicados que cumplen ese criterio y generará un Resultado de Búsqueda de duplicados que podrás ver en la lista de en medio. En la lista se indica además el numero de duplicados que se han encontrado y cuanto espacio adicional ocupan (salvo que hayas buscado por duplicados sin tener en cuenta el tamaño).

buscar duplicados

Ten en cuenta que en un mismo catálogo puedes buscar duplicados por distintos criterios (p.e. para borrar las fotos cuando tengan el mismo nombre y tamaño, pero los documentos sólo si además tienen la misma fecha)

Si seleccionas un resultado de búsqueda de duplicados, a la derecha podrás ver cuantos duplicados se han encontrado, por cada extensión de fichero en la primera lista, y por tipo de contenido en la lista de la derecha. Además del número de ficheros duplicados se muestra el espacio «perdido» (cuanto espacio recuperaríamos si borráramos todos los duplicados, dejando sólo 1 original de cada fichero).

Gestión de duplicados

La gestión de duplicados se hace en la sección inferior. Para hacerla, lo primero que debemos hacer es seleccionar un Resultado de búsqueda de la sección intermedia (recuerda que en cada resultado se ha aplicado un criterio de duplicidad, que puedes ver en la lista).

La gestión la podemos hacer para todos los duplicados encontrados, podemos incluir solo algunos tipos de fichero (imagen, audio, video,…), o podemos incluir todos menos lo que excluyamos explícitamente. Para dar más flexibilidad al filtro, puedes añadir extensiones de fichero «a medida» (marca la opción «Custom» y escribe una o varias extensiones a considerar, separadas por comas -p.e.   .ext1     o   .ext1,.ext2 -).

No marques aún las opciones Mostrar Nº Fichs, ni Comprobar Contenido.

A continuación haz click en el botón Mostrar Dups (este procesamiento puede tardar algo de tiempo en función del número de duplicados).

Antes de hacer click en Mostrar Dups puedes marcar o no la check para que te muestre en cada carpeta el nº de ficheros duplicados que contiene. Si la marcas el proceso de mostrar los duplicados será algo más lento.

Al acabar se habrá generado en el espacio de la derecha una estructura de carpetas que contienen todos los duplicados encontrados.  Para facilitar la gestión NO se mostrarán las carpetas que no contengan duplicados. Si abrimos una carpeta se mostrarán los ficheros que contiene que esté duplicados y otras carpetas si también contienen ficheros duplicados.

Si ves que un fichero tiene «(H)» detrás de su nombre significa que es un fichero oculto (no será visible en un explorador de ficheros, a pesar de estar ahí).

Si seleccionamos un fichero podremos ver en la lista de la derecha dónde está ubicado el fichero (en azul), y todos sus duplicados (en negro).

Ficheros duplicados

Si seleccionamos una de las ubicaciones en la lista de la derecha, haciendo click en el botón derecho del ratón se nos darán opciones para

      • Abrir la carpeta en que está el fichero (de manera que podamos ver qué otros ficheros hay ahí, aunque no estén duplicados)
      • Abrir el fichero, para ver su contenido
      • Mostrar en el árbol de la izquierda el directorio del fichero seleccionado, es decir, intercambiarlos (esto también se consigue haciendo doble-click sobre una ruta).

Debajo de la lista se nos da también la opción de borrar el fichero en la ruta seleccionada.

IMPORTANTE: la gestión de duplicados se basa en la información del catálogo. NUNCA gestiones duplicados con catálogos antiguos (actualízalo con la opción update si has hecho cambios en el sistema de ficheros desde que se generó el catálogo). NO hagas cambios directamente en el sistema de ficheros mientras estás gestionando duplicados (si borras directamente un fichero, p.e. desde el explorador de archivos, y no actualizas el catálogo, ese fichero todavía estará en el catálogo y podrías borrarse desde la aplicación otro fichero del mismo nombre pensando que es un duplicado, cuando ya sería la única copia existente)

Si en el árbol, en lugar de seleccionar un fichero seleccionamos una carpeta podremos ver en la lista de la derecha en qué otras carpetas hay ficheros duplicados con los que hay en la carpeta seleccionada y en todas sus subcarpetas.

Si en la lista de la derecha aparece una ruta en color marrón es indicativo de que hay duplicados entre ficheros que están dentro de la carpeta que tenemos seleccionada en el árbol, y para gestionarlos deberemos entrar más en el árbol.

Duplicates in folder

Si en la lista de la derecha seleccionamos una ruta que esté en negro, haciendo click en el botón derecho tendremos una opción para abrir esa carpeta y otra para intercambiar los directorios (es decir se muestra en el árbol la carpeta que hemos seleccionado y en la lista las carpetas que tienen duplicados con el contenido de ésta -este intercambio también lo realizamos si hacemos doble-click sobre una ruta-).

Nos aparecen también 2 botones, uno para que se nos muestren los ficheros duplicados que hay entre la carpeta seleccionada en el árbol y la carpeta seleccionada en la lista (y todas sus subcarpetas), y otro para borrar todos los duplicados comunes entre ambas carpetas sin examinarlos primero. En la lista podemos seleccionar varios directorios a borrar (nos pedirá confirmación antes de borrar).

Duplicate files between folders

Comprobando el contenido de los ficheros

Dijimos más arriba que comprobar el contenido de todos los ficheros es algo muy costoso, sin embargo puede ser necesario hacer esta comprobación antes de borrar para asegurar que 2 ficheros son realmente duplicados y no sólo coinciden en el nombre y en el tamaño (ya vimos que 2 ficheros pueden tener el mismo nombre y tamaño y tener contenidos distintos, también pueden tener distinta fecha y ser sin embargo iguales).

Para reducir el tiempo de proceso Duplica2 ofrece 2 opciones de comprobación de contenido:

Por ficheros

Cuando seleccionamos un fichero en el árbol de duplicados, a la derecha nos sale la lista de ficheros con sus mismas características (mismo nombre, y en su caso mismo tamaño/fecha). Recordemos que aparece en azul el seleccionado y en negro sus duplicados.

Debajo de la lista tenemos la opción de borrar el fichero que seleccionemos, y también tenemos un botón para comprobar el contenido. Si lo pulsamos, veremos que al cabo de un tiempo corto (sólo se comprueban los ficheros de la lista), la 2ª columna (de comprobación de contenido, C.) ha pasado de tener un guión a tener una letra. Cada letra representa un contenido distinto, es decir, si todos los ficheros tienen una A, eso significa que son todos iguales, byte a byte, si hay p.e. una A, una B, una A y una C, significa que el primer y el tercer ficheros son iguales, pero el 2º y el 4º son distintos. Si hay muchos ficheros podrán aparecer letras desde la A a la Z si hubiera muchos contenidos distintos.

Comprobar contenido duplicados

En el caso en que haya más de 25 contenidos distintos entre los duplicados, verás que a partir del 25 aparecerá «…» en lugar de una letra en representación del contenido (estos ficheros tienen contenidos distintos a los 25 anteriores, A-Z, pero no se indica cual).

Ahora sí podemos borrar estando seguros de si los contenidos son iguales o distintos. En el ejemplo de los 4 ficheros A-B-A-C, si sólo queremos borrar duplicados deberíamos borrar uno de los ficheros A y conservar el B y el C.

Para comprobar el contenido de los ficheros y compararlos se utiliza un hash MD5 calculado sobre todo el contenido del fichero (por eso tarda el cálculo, a velocidades cercanas a 1GB/minuto, en función del tipo de disco y procesador).

Para todo el catálogo

También podemos hacer la comprobación del contenido para todo el catálogo (si es pequeño), o para algún tipo de archivo dentro del catálogo (p.e. para los videos). Está comprobación se hace sólo sobre los potenciales duplicados en lugar de para todo el catálogo de manera que reducimos la cantidad de ficheros a comprobar y mejoramos el rendimiento (ten en cuenta de todas maneras que el proceso puede llevar cerca de 1 minuto por cada GigaByte a comprobar).

Para ello, una vez seleccionas un Resultado de Búsqueda, pero antes de dar al botón Mostrar Duplicados, puedes seleccionar el tipo de archivo que te interesa y marca la check Comprobar Contenido. De esta manera se analizará el contenido completo de cada uno de los ficheros.

Si antes de pulsar el botón marcas además la check Mostrar solo =’s (mostrar sólo iguales), en el árbol sólo se mostrarán los duplicados reales, en los que se ha comprobado que el resultado es el mismo byte a byte (sin importar ya la fecha). No se mostrará los potenciales duplicados que han resultado con distinto contenido tras la comprobación.

Si seleccionas un fichero se mostrarán sus duplicados, y podrás verificarlo con la columna de contenido (C.). Si seleccionas un directorio sólo se tendrán en cuenta los directorios con duplicados reales y podrás mostrarlos o borrarlos.

Si no marcas la check Mostrar solo =’s (mostrar sólo iguales), en el árbol se seguirán mostrando todos los potenciales duplicados, pero habiendo revisado ya su contenido, de manera que al mostrar los duplicados de un fichero ya se marcará la letra A-Z que indica si el contenido es el mismo o no. Queda de tu lado decidir qué ficheros borras. OJO: ten en cuenta que si seleccionas un directorio a la derecha se muestran los directorios que contienen potenciales duplicados (aunque hayan resultado distintos en la comprobación), por lo que si borras un directorio borraras potenciales duplicados, aunque no sean duplicados reales (para asegurar es conveniente marcar la check Mostrar solo =’s si no estás seguro de qué estás haciendo).

Archivado de catálogos

Los catálogos que generes se borrarán cuando cierres la aplicación (para gestionar duplicados es conveniente que los catálogos estén recién generados). Si quieres conservar un catálogo, en el menú tienes una opción para archivarlos (también puedes hacerlo seleccionando el catálogo a archivar y tecleando CTRL-A). Antes de archivar un catálogo puede que quieras darle un nombre que te recuerde qué contiene. Para ello selecciona el catálogo, haz click en el botón derecho del ratón y selecciona la opción «Añadir Descripción». En la ventana que te aparecerá teclea el nombre o la descripción que quieres darle (este texto se guardará en el archivo y se mostrará cada vez que pases el ratón por encima de un catálogo).

Cuando abres la aplicación se mostrarán en la ventana de catálogos los que hayas archivado (en gris), y cualquiera que generes nuevo (en negro). Los catálogos archivados no se cargan en memoria (para no cargar innecesariamente la aplicación). Si quieres trabajar con un catálogo debes cargarlo (Menú Load o tecleando CTRL-L). Cuando finalice la carga aparecerá con color verde, lo que te indica que puedes utilizar las opciones de catálogo (comparar, encontrar, ver contenido, buscar duplicados). No se permite realizar borrado de duplicados con los catálogos archivados (deben ser creados o actualizados en la sesión actual).

Buscar en un catálogo

En cualquier momento puedes buscar un fichero o una carpeta en un catálogo. Para ello, selecciónalo y pulsa en el botón Find.

Indica si quieres buscar un directorio o un fichero, y si puede ser de cualquier tipo o te interesan solo los de determinados tipos.

En el campo de texto pon la cadena a buscar y pulsa el botón Search. Si dejas marcada la check se buscarán ficheros o directorios que contengan en su nombre el texto indicado. Si no la marcas se buscaran ficheros o directorios que se llamen exactamente como has indicado (sin tener en cuenta mayúsculas o minúsculas)

Search file or folder in disk

Comparar Catálogos

La comparación de 2 catálogos es útil principalmente en 2 situaciones:

    • Comparar tu disco en 2 momentos distintos, para ver qué ha cambiado en ese intervalo de fechas (qué se ha añadido, qué se ha eliminado, qué ficheros han cambiado)
    • Comparar un disco o carpeta con el disco o carpeta en que se guarda su copia de seguridad, para verificar si el backup es correcto, si falta algún fichero, si hay ficheros que no están en el original, o si la fecha o tamaño del original y la copia son distintos (p.e. porque hayas editado en la copia en lugar de en el original -en cuyo caso perderás los cambios al actualizar la copia-).

Para hacer la comparación selecciona los 2 catálogos en la ventana principal y haz click en el botón Compare. Se abrirá una ventana con 3 secciones:

    • ficheros que están en el primer catálogo y no en el segundo,
    • ficheros que están en el segundo, pero no en el primero,
    • ficheros que están en ambos, pero son distintos (por tamaño y/o fecha).

Backup Verification comparing folders

Como en otras listas de ficheros, también aquí con el botón de la derecha tendrás la opción de abrir el fichero.

Espacio ocupado en un catálogo

Para ver cuanto ocupan las carpetas dentro de una catálogo (generalmente para saber quién se está comiendo el espacio), selecciona en la ventana principal el catálogo que te interesa y haz click sobre el icono de información que hay al lado del tamaño total del catálogo. Se te abrirá una ventana donde puedes ver el tamaño que ocupa cada carpeta/directorio (con sus subcarpetas/subdirectorios) y navegar por la estructura de carpetas. En la columna de la derecha se muestra qué porcentaje del espacio total del catálogo es ocupado por cada carpeta (y lo que tiene dentro).

disk and folder size by file type extension

En las listas de la izquierda puedes ver cuanto ocupan los ficheros de cada tipo y de cada extensión, y el nº de ficheros de cada uno que hay en el catálogo.

Preferencias

Hay una opción de menú en que podrás cambiar algunas preferencias:

    • Idioma de la aplicación
    • Tipos de ficheros y su asociación a extensiones (no disponible todavía)
    • Ubicación del archivado de catálogos
    • Número de niveles a mostrar en el árbol de información de catálogo en la 1ª fase (no subir demasiado para catálogos grandes)
    • Tope opcional de resultados en la comparación entre catálogos
    • Licencia de uso de la aplicación (todas o algunas de las funcionalidades podrán requerir una licencia, temporal o de largo plazo)

 

Calamares en su tinta

Recetas con calamares, chipirones o puntillitas (tan sólo una cuestión de tamaño) hay muchas. Para mi unos chopitos, unas rabas o unos calamares en su tinta son de las mejores opciones, aunque tienes también el arroz negro, los chipirones encebollados, el calamar plancha, …

Vayamos con los calamares en su tinta

Ingredientes

    • 1 1/2 Kg de calamares (o chipirones, pota o sepia)
    • 1 pimiento verde
    • 1/4 pimiento rojo
    • 2 cebollas
    • 2 dientes de ajo
    • 1 hoja de laurel
    • 1 lata de tomate triturado (400gr)
    • 2 a 4 sobres de tinta de calamar/sepia
    • 1 vaso de vino blanco (puedes usar cerveza en su lugar)
    • (opcional fumet de pescado)
    • arroz

Como en muchas ocasiones, todo empieza en el mercado. No es lo mismo el calamar que la pota (que es algo más dura y puede tener un sabor más fuerte). En función de la disponibilidad y tu gusto la receta la puedes hacer con calamar, con pota, o incluso con sepia si te apetece probar.

Otro aspecto a decidir es el tamaño, un chipirón de unos 10-15cm o un calamar de unos 20-30. Para esta receta no usaría puntillitas si te gusta notar el calamar (desaparecen en el guiso).

Una vez en casa, para ser más eficientes lo primero será cortar fina la cebolla y pocharla a fuego lento  con una cantidad generosa de aceite. Echa también los ajos picados muy finos y el pimiento cortado fino.

Mientras se pocha, y sin olvidar moverla de vez en cuando, procederemos a la limpieza de los calamares. Si sois varios en la cocina, podéis hacer esta labor «en serie»: uno se dedica a los cuerpos, otro a las cabezas, otro a los cortes.

calamares

En la limpieza del calamar los puntos principales son quitar las tripas y todo el interior del cuerpo del calamar, pluma incluida, y quitarle a la boca (en el centro de las patas) los «picos». Puedes elegir entre muchas opciones : dejar la piel o quitarla, cortar la cabeza justo por encima de los ojos o aprovechar más y vaciar las cuentas de los ojos, quitar de la boca los picos o quitar todo el saco que los contiene, tirar todas las tripas o conservar los sacos de tinta. Tú decides. Si a la hora de vaciar el cuerpo encuentras que tiene huevas (una masa amarilla en la que se nota la textura de las huevas -como caviar pero más viscosa-), puedes mantenerlas, dado que dan bastante sabor.

Una vez limpios, y en función del tamaño del calamar y de tus gustos, corta los cuerpos en cuadrados de unos 3 cm  de lado, o en anillas (a mi me gusta más en trozos que en anillas). Si los calamares son pequeños, puedes dejarlos enteros, si son grandes puedes querer partir la cabeza/patas por la mitad. Ten en cuenta que al cocer, el tamaño de las piezas se va a reducir a la mitad o un tercio del tamaño en fresco.

calamares troceados

Una vez la cebolla esté pochada (cuando haya empezado a coger color), añade el tomate y déjalo hacerse durante unos 10 minutos. Mientras tanto prepara el vaso de vino y echa dentro la tinta del calamar. Si habías reservado las tintas de los cuerpos cortalas por la mitad y échalas también en el vino aplastándolas para que suelten su contenido. Remuévelo todo para que se disuelva la tinta, aplastándo los sacos de tinta si los has echado.

Cuando el tomate empiece a estar hecho, y ya no quede líquido, añade el vino con las tintas (pasándolo por un colador si has usado los sacos de tinta de los calamares) y añade la hoja de laurel, dejando que el vino se caliente para que pierda algo de alcohol.

Añade los trozos de calamar. Ahora puedes echar 1/2 vaso de fumet si quieres. Deja cocer a fuego medio durante unos 20 minutos. Añade más fumet o algo de agua si se queda demasiado espeso.

Mientras tanto prepara un arroz blanco (calentar en un cazo un poco de aceite, echar el arroz, remover, poner doble de agua que de arroz, un poco de sal, fuego al máximo hasta que hierva y bajar a fuego medio-bajo hasta que esté hecho -unos 20 min.-).

Emplata y disfruta (tienes también la opción de dejarlo reposar -dicen que los guisos mejoran con el reposo, si aguantas sin comerlo antes-, y tomarlo al día siguiente -haciendo el arroz en ese momento-).

Receta de Sushi (maki)

Lo solemos llamar sushi a secas, pero en realidad el sushi tiene unas cuantas variantes. El origen de la palabra sushi tiene que ver con adobo, y con los años se ligó al arroz, aunque éste no estuviera en su origen. El pescado es el principal elemento, aunque también las verduras, o incluso el huevo y la carne son ingredientes que pueden formar parte de este plato.

Preparando el sushi

Por desconocimiento solemos llamar sushi de manera genérica a :

    • makisushi, es el típico rollito que se hace forma con alga nori como cubierta y en el interior tenemos una capa concéntrica de arroz y en el centro el pescado o los ingredientes que hayamos elegido. El rollo sale de la longitud del alga (unos 20 cms) y se corta en makis (tradicionalmente sale 8 de cada rollo con 3 cortes, o más si vas haciendo rodajas como si se tratara de un chorizo y te gustan más finos). Tradicionalmente se toman con palillos y en occidente nos hemos acostumbrado a remojarlos en salsa de soja y acompañarlos de un poco de wasabi y jengibre encurtido. En su elaboración hay variantes, como dejar el arroz por fuera, usar otros ingredientes como capa exterior (tortilla, verdura) o recubrirlos p.e. con caviar.

taco de makisushi

    • temaki, es una variante del maki, en que se forma un cono con el alga nori, de unos 8 cm, y dentro se pone el arroz y el resto de los ingredientes, sobresaliendo por la parte abierta.
    • nigiri (o nigirisushi), una bola de arroz al que s epone encima una lámina de pescado o del ingrediente que queramos. Puede atarse con una tira de alga nori. Se suele aderezar con un poco de wasabi y nosotros solemos «mojarlo» en salsa de soja.
    • sashimi, en realidad no es sushi, se trata de pescado cortado en láminas (finas, pero sin pasarse) y generalmente acompañado de wasabi, gengibre y soja. El pescado suele ser crudo, aunque puede estar también marinado o ligeramente cocina. Algunas variantes pueden preparase con verdura o carne en lugar de pescado.

En esta receta vamos a hacer makisushi, aunque una vez hayamos cogido el truco verás que pasar al resto de variantes ya es un juego de niños.

Ingredientes

(para hacer 10 rollos de sushi, unas 6-10 personas según si es plato principal o acompañamiento)
    • 500 gr de arroz para sushi (es más transparente y suelta menos almidón que el normal)
    • 700 ml de agua
    • 150 ml de vinagre de arroz condimentado para sushi (sushi-zu), si no tienes lo puedes preparar mezclando vinagre de arroz, azúcar y sal, típicamente en una proporción 5:2:1).
    • 10 hojas de alga nori
    • 300 gr de solomillo de atún
    • 400 gr de lomo de salmón, sin piel ni espinas
    • 5 gambones (la cola)
    • 1 aguacate
    • 1 huevo
    • 1 zanahoria
    • soja (reducida en sal a poder ser)
    • un poco de pasta de wasabi
    • jengibre encurtido

Para hacer makisushi necesitarás también una esterilla de bambú.

El primer elemento a trabajar es el pescado. Debemos comprar en la pescadería un pescado de una cierta calidad y tamaño. Recuerda que lo vamos a comer crudo, por lo que deberás congelarlo (al menos 48 horas).

Yo te recomiendo empezar con un lomo de salmón y un solomillo de atún. Puedes añadir también unos gambones. Una vez comprados, debes  congelarlo todo, para prevenir el anisakis, por lo que hacer este plato requiere cierta anticipación. Deja el pescado en el congelador y sácalo al cabo de unos días (yo suelo tener siempre en el congelador un trozo de cada y lo saco cuando nos apetece hacer sushi en casa, lo mismo 1 mes más tarde).

Al salmón hay que quitarle las espinas que le hayan quedado al sacar los lomos en la pescadería (las suelen cortar y se quedan en la carne). Para ello lo mejor es tirar de ellas usando unas pinzas (de quitar pelos) , que estén limpias. Detectarás las espinas pasando el dedo suavemente por la cara interna del lomo.

El pescado lo debes cortar en tiras. Lo más cómodo es aprovechar cuando todavía está semicongelado, de manera que está suficientemente blando como para cortarlo con un cuchillo afilado, pero suficientemente rígido como para mantener la forma y que las tiras te salgan con las líneas rectas.

salmon y atún en tiras

Las tiras deben tener aproximadamente 1 cm de ancho y alto, por todo el largo de la pieza de pescado. Una vez cojas práctica puedes probar a cortarla con otros anchos, según los ingredientes que vayas a juntar en el maki.

Si vas a usar gambones, pélalos y quítales el tracto digestivo (la «vena» negra que tienen en la espalda). Yo los suelo pasar un poco por la sartén (vuelta y vuelta) para reforzar su sabor.

Bate un huevo y haz una tortilla francesa, intenta que te quede larga. Cuando esté hecha córtala en tiras.

De verdura vamos a usar un aguacate. Pélalo y córtalo por la mitad (mejor a lo largo) y quítale el hueso. A continuación córtalo en láminas de unos 3 a 5 mm de grosor, y éstas en tiras.

aguacate en láminas

Puedes hacer también tiras con zanahoria (pélala, córtala en laminas a lo largo, y estas en tiras finas, de unos 2mm de ancho). A mi no me gusta el pepino, pero si a ti sí, puedes hacer láminas con un trozo y partirlas tb. en finas tiras.

Coloca los ingredientes en platos o fuentes, de manera que luego tengas a mano tu paleta de ingredientes para hacer el sushi.

paleta de ingredientes sushi

Pon el arroz en un colador y lávalo bajo el chorro de agua fría, hasta que el agua salga clara (unos 20 minutos moviendo el colador bajo el agua). Déjalo reposar unos minutos para que el agua escurra.

Pon en una cazuela 700 ml de agua , echa el arroz y ponla a fuego máximo hasta que hierva, a continuación tápala y baja el fuego a nivel medio. dejándolo unos 15 minutos.

Saca el arroz del fuego y dispérsalo en una fuente o bol grande (que no sea de aluminio para que no le afecte el vinagre). Vete echando el vinagre condimentado mientras mezclas con una espátula y abanicas el arroz para que se vaya enfriando hasta casi la temperatura ambiente (un abanico, una revista o un ventilador te ayudará en esta tarea). La espátula coge arroz desde abajo y lo mueve, volteándolo, no debe «remover» el arroz ni aplastarlo. Cuando acabes puedes cubrir el arroz con un paño húmedo para que no se seque.

Coge una hoja de alga nori y colócala sobre la esterilla (yo les suelo quitar una tira longitudinal de unos 2-3 cm cuando voy a a hacer rollos finos, para que no tengan demasiada alga), con la parte brillante hacia abajo.

Humedécete la mano en un bol de agua, coge «un puñado» de arroz y distribúyelo por el alga nori, dejando libre el primer cm y los últimos 2 o 3 cms. El arroz debe estar distribuido formando una capa fina (no te preocupes si hay alguna pequeña calva, si es grande rellénala). Es importante que los dedos esté húmedos para que el arroz se pegue menos. La distribución del arroz se hace con las puntas de los dedos (usando una mano, la otra sujeta la esterilla).

Elige los ingredientes de tu primer rollo y colócalos en el centro del arroz, formando una línea.

Coloca los pulgares de ambas manos por debajo del borde de la esterilla más cercano a ti, y sujeta los ingredientes con el resto de los dedos mientras haces un movimiento para enrollar la esterilla con la hoja de nori (los dedos gordos empujan mientras los demás sujetan para que los ingredientes no se caigan).

Cuando la esterilla toque el otro lado, aprieta todo hacia ti, de manera que presionamos en el interior del rollo el arroz con los ingredientes y dejamos que el extremo más alejado del alga nori salga por debajo de la esterilla a medida que la apretamos (este es el movimiento más crítico y requiere algo de práctica).

Es importante que el arroz este apretado, así es que nos traemos el extremo de la esterilla hacia nosotros con fuerza. A continuación cerramos el rollo haciendo rodar la esterilla. Antes de cerrarlo yo suelo humedecer el extremo del alga nori con un poco de wasabi diluido en agua (la humedad facilita el cierre del rollo, y el wasabi le añade un poco de sabor -muy poco, para no arruinarlo-). Si hemos apretado el rollo lo podemos dejar así, o podemos aplastar los lados para así darle una presión adicional (son matemáticas: dado un perímetro fijo, la superficie es menor en un cuadrado que en una circunferencia). Para acabar el rollo es conveniente humedecer los dedos y apretar los rollos por los 2 extremos de la esterilla, para compactar los extremos del rollo y que no se nos desmoronen.

Tienes 10 hojas, y al menos 3 ingredientes principales con 3 ingredientes secundarios, por lo que puedes hacer muchas combinaciones:

     

     

Cuando tengas todos los rollos, prepara una bandeja, una madera y un buen cuchillo. Toca cortar los makis.

El arroz se va a apegar al cuchillo, por lo que antes de cortar cada rollo debes limpiar el cuchillo bajo el chorro de agua, dejándolo húmedo. Sécate las manos, sujeta el rollo con una mano y corta «lonchas» deslizando el cuchillo sin aplicar demasiada fuerza. Cuando veas que ya no corta bien porque el cuchillo » se pega», te toca volverlo a limpiar. El grosor de los makis lo decides tú, pero ten en cuenta que deben entrar cómodamente en la boca. Si el rollo es ancho puedes cortar makis de 1 cm, si es fino pueden ser de hasta 2 cm.

Vete colocándolos en el plato o fuente según vas cortando, Los extremos yo suelo ponerlos en un plato aparte, porque el aspecto es muy distinto (aunque están igual de buenos).

Para servirlos, acompáñalos de salsa de soja (mejor si es salsa japonesa -es más ligera- y si es baja en sal -la salsa de soja tiene mucha sal, y vas a tomar bastante con los makis-). A mí me gusta poner también un poco de jengibre encurtido y unos «guisantes» de wasabi (no a todo el mundo le gusta, pero que puedan probar). Lo suyo es comerlo con palillos, pero al modo occidental: se moja el maki en un platillo con salsa de soja añadiendo o no una pizca de wasabi y un trocito de jengibre (los japoneses no le ponen  tanta salsa de soja, porque tapa en cierta medida el sabor del pescado).

 

Gestión de duplicados y discos

Si has leído la entrada Almacenamiento y Copia de Seguridad, es probable que ya estés siguiendo sus consejos de hacer copia de seguridad de tu información importante.

Con el tiempo, tus discos, los originales y los que mantienen las copias, se han convertido en lagunas donde descansan miles, cientos de miles de ficheros.

En mi ordenador portátil tengo 2 discos internos: uno tienen el sistema operativo y los programas, el otro tiene una parte importante de mi información personal y mis datos. Contiene 171.638 ficheros…

A la hora de gestionarlos me he encontrado con varios problemas:

      • Tengo muchos ficheros duplicados, las fotos del baile de la niña, que me bajé de internet, pero también las tengo en el directorio donde bajo las cosas del móvil, y en los attachments que descargué del correo.
      • Hago backup de mis ficheros a un disco externo de manera periódica (lo haces tú?), pero he cambiado la estructura de carpetas en el ordenador, y en el disco de backup se han quedado tanto en la estructura antigua como en la nueva.
      • No sabía cómo confirmar si mi backup tenía todos los ficheros que debía tener.
      • Cuando he podido comprobarlo (luego veremos cómo), me he encontrado que algunos ficheros no estaban bien (principalmente porque sin querer había editado en la copia en lugar de en el directorio original -eso implica que si posteriormente cambio el fichero original perderé los cambios realizados en el backup al hacer la copia-)
      • No tengo fácil saber qué ficheros han cambiado en mi ordenador, se han borrado o son nuevos desde p.e. la semana pasada (porque he instalado un nuevo programa, porque le he dejado el ordenador a mi hijo o porque he metido unos ficheros y no sé cuales ni dónde)
      • A la hora de hacer espacio para meter nueva información, me gustaría ver fácilmente cuales son los ficheros que más ocupan, y cuanto espacio pierdo en los principales ficheros duplicados.
      • Me gustaría encontrar rápidamente directorios o ficheros que cumplan ciertas condiciones mientras estoy gestionando el contenido de todo ese almacenamiento.
      • Tengo un disco de backup de un ordenador antiguo, pero no estoy seguro de si tengo ahí algún fichero que no metiera en su momento en el nuevo ordenador y me gustaría compararlos.

Cuántas de estas cosas te pasan también a ti?

Para resolver estos problemas he desarrollado el programa Duplica2 que puedes encontrar en la sección de páginas Relacionadas.

Duplica2

Con Duplica2 puedes  (manual del usuario):

    • Escanear tus discos o ciertos directorios que para ti son importantes, creando un catálogo de su contenido en un momento determinado, registrando su fecha de realización
    • Comparar 2 elementos del catálogo de procesos de escaneado, pudiendo ser:
      • del mismo disco o directorio, en 2 momentos distintos, para ver qué ha cambiado en el intervalo de tiempo entre ellos.
      • de 2 discos o directorios distintos (típicamente el original y donde guardamos la copia), para ver qué diferencias hay: qué hay en el original que aún no esté en la copia, qué hay en la copia que ya no esté en el original, qué hay en los 2 sitios, pero son diferentes
    • Buscar ficheros o directorios en cualquiera de los procesos de escaneado del catálogo, con una velocidad pasmosa
    • Ver, con un click, cuales son los ficheros más grandes
    • Ver qué en qué carpetas se concentra la ocupación de espacio.
    • Ver cuantos ficheros hay duplicados, de qué tipo son y cuánto espacio de disco estamos perdiendo por ello.
    • Localizar los ficheros duplicados en la estructura de directorios, pudiendo centrarme en los de determinados tipos si p.e. me interesa focalizar la localización sólo en imágenes, en vídeos, o en música, etc.
    • Gestionar los ficheros duplicados de manera sencilla, identificando qué quiero conservar y qué quiero borrar, sin necesidad de hacerlo fichero a fichero (puedes seleccionar ficheros individuales o indicar de qué directorio quiero borrar los duplicados)
    • Realizar el backup de un disco o directorio, pudiendo comprobar que está todo lo que tiene que estar, y chequeando antes que no he realizado cambios incontrolados en la copia de seguridad (funcionalidad aún no disponible)

El desarrollo de la primera release ha finalizado, ofreciéndose la funcionalidad completa de identificación y borrado de duplicados.

Yo hasta hora estoy usando el programa FreeFileSync para hacer mis copias de seguridad, pero probablemente incluya también esta funcionalidad en Duplica2  en una segunda fase, para tener todo en el mismo sitio, y para hacer algunas mejoras, como tener una catálogo de copias realizadas o asegurar que no pierdo información porque cometí el error de editar en la copia en lugar de en el original.

 

Gestión de Almacenamiento y Copias de Seguridad

Explosión de información, y ficheros

Si una cosa ha explotado de manera exponencial en los últimos años, es la información de la que disponemos,a nivel estatal o empresarial, y a nivel particular. Y con ella también se ha multiplicado nuestra capacidad de almacenamiento, para que no se nos pierda ningún dato, foto o video.

Han pasado casi 40 años desde aquella época en que guardábamos la información en disquetes flexibles de 256 KB (kilo bytes, miles de bytes, para simplificar imagina que ocupas un carácter de un documento por cada byte, en 256KB puedes meter un documento de 50 a 100 páginas ), después de 512 KB, y algo más tarde en los rígidos y más pequeños de 1,44 MB (mega bytes). Nota: en realidad en informática el múltiplo para los K’s no es 1.000, sino 1.024 (por ser una potencia de 2 -2^10-). Con ello el MB no es 1000×1000 bytes, sino 1024×1024, y así para el resto de unidades superiores.

Floppy disks

Los disquetes los podíamos llevar en una carpeta o una caja, los podíamos intercambiar y copiar. Teníamos unas pocas cajas en casa y perdíamos la información si pasaban cerca de un imán, se doblaban, o tras mucho uso.

En aquellos años aparecieron también los discos duros, estaban dentro del ordenador (aunque algún fabricante los tenía removibles), eran mucho más rápidos y tenían una capacidad mucho mayor, desde los 10 MB iniciales, a 20 MB poco después, 40, 60,100… Aumentando año a año, de manera similar a la potencia de los procesadores que cumplen la llamada ley de Moore (doblan su capacidad aproximadamente cada 2 años años).

Aparecieron algo después los dispositivos USB de almacenamiento, los pendrives, inicialmente con capacidades de 256MB, pero aumentando también rapidamente año a año. Inicialmente una canción ocupaba unos 40MB, pero con la compresión del formato mp3 se redujo a tan solo unos 3MB.

Y la capacidad de los discos duros siguió aumentando, 1GB (miles de millones de bytes), 10 GB, 100GB, 1TB (1 billón de bytes), o los actuales de varios TB. También la de los pendrives o las tarjetas SD, con capacidades de almacenamiento de p.e. 256GB en la punta de un dedo.

SD en la punta de un dedo

Y la memoria RAM? os acordáis del Spectrum de 16KB? hoy venden ordenadores portátiles con 16GB o más. El incremento es de 1 millón de veces en 35 años, y todavía hay veces que se nos queda corto…

Spectrum

Es lo que tienes las magnitudes que evolucionan de manera exponencial (ya lo hemos aprendido con el corona virus), aunque sea con índices pequeños, como en estos casos, que no llegan a 1,5.

CPU y RAM exponencial

Como particulares, dónde tenemos esta capacidad de almacenamiento?

La tenemos en nuestros móviles, en nuestros ordenadores, en nuestras tabletas, y desde hace no muchos años también en la nube, gracias a proveedores como Google, DropBox evernote,… También la tenemos en dispositivos «externos» o de backup (principalmente discos externos, pendrives y tarjetas SD -atrás quedaron otros medios como el CD o el DVD)

Y tenemos miles de gigabytes (GB) o varios terabytes (TB). Sí, miles de millones de bytes, o billones. Y los ocupamos con música, fotos y videos, muchos videos.

Elementos que es muy fácil generar gracias a los móviles y que llenan espacios donde a veces no volvemos a mirar.

Junto con esos ficheros multimedia también tenemos documentos, probablemente en proporción mucho menor, no como hace unos años, pero en muchos casos con una importancia mucho mayor.

Hoy en día el móvil es el principal generador de ficheros multimedia, algo nuevo, porque hace no tantos años que no teníamos casi ningún fichero de ese tipo. Os acordáis de las fotos en papel y de los negativos?

Y qué hacemos con tanta información?

Pues en muchos casos borrarla (no me cabía la película y he tenido que eliminar unas cuantas fotos) o perderla (se estropeó mi móvil -o mi ordenador-) y lo he perdido todo.

Y en pocos casos mirarla, disfrutarla, ordenarla, explotarla de alguna manera. Sí, el primer día sí, pero luego queda en el olvido, hasta que un domingo por la tarde no sé que hacer y me pongo a ver las fotos del último verano.

Pero ahí está, por si algún día tengo que volver a leer la letra pequeña de la hipoteca.

Te acuerdas de esa receta que te pasaron por correo hace 3 años? yo tampoco…

La Copia de Seguridad (backup)

Mucha gente no sabe lo que es. Otros lo tienen muy claro porque lo han sufrido en sus carnes: tus documentos se pueden perder. Si la información es importante hay que tener al menos una copia de seguridad, y si se es responsable y organizado se siguen además algunas pautas que son muy recomendables:

      • Tener una copia de seguridad siempre de todo documento importante, y si se puede más de una mejor (aunque su gestión sea más compleja)
      • Si el volumen es importante, discriminar. Elige de qué hacer backup y de qué no (esos chistes de whatsapp ocupan más que las fotos de tu bebé?)
      • Mantener la copia de seguridad en un lugar distinto al del original, para reducir la probabilidad de perder las dos ante un accidente
      • Actualización frecuente de la copia de seguridad (si ocurre un desastre perderemos todo lo que añadimos o modificamos desde la última vez que actualizamos la copia)
      • Verificación periódica de los medios de almacenamiento y su contenido (está todo? sigue funcionando?), y al primer problema se pasa todo a un nuevo medio)
      • Actualización de la tecnología de almacenamiento: lo que teníamos en CD’s lo pasamos a DVD, y de ahí a discos externos o a la nube. Encontraré a día de hoy algún lector para mis viejos disquetes de 1.444MB?.
      • Pensar en la seguridad de acceso a las copias de seguridad. Están accesibles a cualquiera que la encuentre? Las he encriptado? me acordaré de la password? Existirá dentro de 5 años el programa que me permita acceder o desencriptar?
      • Exigir lo mismo a nuestro proveedores, y comprobar que lo cumplen. Haces copias de seguridad en la nube? muy bien, pero aunque la probabilidad de pérdida puede que sea menor a la de tu disco, se cumplen las pautas?

 

Pochar cebolla

La cebolla es uno de los elementos más básicos de la comida española, pero también de la de muchos otros países.

Para pochar la cebolla lo primero es partirla según las necesidades de la receta:

    • gruesa, en cuadrados
    • en aros
    • en tiras
    • picada fina

Cebolla Picada

A continuación pondremos aceite en una sartén (como mínimo debe mojar toda la superficie, si echamos más facilitaremos la preparación de la cebolla, pero puede añadirle demasiada grasa al plato que quieras elaborar).

Pochando cebolla

Echamos la cebolla y la dejamos hacer a fuego medio-bajo, removiendo continuamente. Si ponemos el fuego más alto se hará más rápido y habrá que mover continuamente. Si lo ponemos más bajo se hará de manera más uniforme, tardará más y moveremos con menos frecuencia, p.e. cada minuto.

El punto final de la cebolla dependerá de la receta: que esté transparente, que empiece a tostarse o que esté tostada.

Cebolla Pochada 1Cebolla pochada 2

Cuando pasa a estar transparente ya ha perdido su picor natural. A partir de ahí irá resaltándose el dulzor y el sabor a cebolla frita. No te preocupes si se tuesta (mientras no se queme), si la dejas absorber líquidos se volverá trasparente de nuevo, quedando con un poco de color y con ese sabor más dulzón, de cebolla frita.

 

Pollo al curry

Esta receta es una de las muchas que puedes hacer con curry. en las sección de páginas Relacionadas podrás encontrar otra con coco y verduras.

La receta se puede hacer con pollo, pero también con cordero o con cerdo.

Si usas pollo es mejor utilizar contramuslos deshuesados que pechuga (la pechuga es más seca y quedará un plato menos jugoso). Si usas cerdo utiliza jamón o solomillo mejor que lomo (por el mismo motivo, el lomo es una carne menos jugosa).

Curry de Pollo

Ingredientes

    • 600 gr de contramuslo de pollo deshuesado (o la carne que tú elijas)
    • 1 cebolla grande
    • 1 o 2 dientes de ajo
    • 2 cucharaditas de curry en polvo
    • 1 yogur o 200 ml de nata para cocinar (no pasa nada si pones 1 de cada, prueba tus variaciones)
    • (Opcional) Un poco de jengibre rallado o en polvo

Para acompañar

    • 1 vaso de arroz basmati (es el mejor tipo de arroz para platos con curry. Si no tienes usa arroz normal)
    • (Opcional) la ralladura de media naranja

Pica la cebolla y el ajo muy finos y ponlos a pochar en una sartén a fuego medio, con un chorro de aceite (puede ser de oliva, de sésamo o de cacahuete, cada uno de ellos le añade un aroma un poco distinto).

Si lo vas a usar, cuando esté transparente la cebolla añade el jengibre. Sigue pochando, removiendo  hasta que empiece a tostarse la cebolla.

Mientras, limpia la carne del exceso de grasa y córtala en dados, de unos 2 cms de lado.

Dados de pollo

Cuando ya aparezcan los tonos marrones en la cebolla, apártala a un cuenco. Asegúrate de que haya quedado algo de aceite en la sartén, y si no, añade un poco. Sube el fuego al máximo.

Vete echando el pollo, para que se selle completamente. Remueve para que se haga por todos los lados. Añade el curry y remueve.

Curry de madrás

Incorpora el yogur y/o la nata y baja el fuego a la mitad. Echa un par de pellizcos de sal y remueve. Prueba el punto de sal, teniendo en cuenta que el curry va a hacer que haga falta menos que en otros platos. Déjalo a fuego bajo unos 20 minutos más, hasta que la carne quede bien hecha por dentro. Si se consume el líquido y quieres tener más para mojar el arroz puedes agregar un poco de leche.

Mientras, echa en un cazo un poco de aceite y cuando esté caliente échale la ralladura de media naranja y el arroz basmati y remueve.

Arroz Basmati con Naranja

Incorpora 2 y 1/2 vasos de agua y un pellizco de sal y déjalo a fuego fuerte hasta que hierva, baja el fuego a la mitad y mueve el arroz (sólo un poco, para que no estén abajo siempre los mismos granos).

Cuando se haya absorbido el agua, vuelve a mover el arroz, y cuando esté seco ya puedes emplatar, aproximando la carne y el arroz pero sin juntarlos.

 

Ensalada templada de garbanzos

Esta es una manera sabrosa de incorporar legumbres a tu dieta, a modo de entrante «ligero» en lugar de plato principal. Siendo garbanzos el ingrediente principal lo de ligero no es más que una manera de diferenciarlo de un cocido o una ropa vieja que siendo también sabrosos, son más pesados.

Ensalada Garbanzos

Ingredientes

    • 600 gr de garbanzos cocidos (unos 300 gr de garbanzo seco si los vas a cocer ahora)
    • 1 cebolla grande
    • 1 o 2 dientes de ajo
    • 1/2 pimiento verde
    • 1/4 de pimiento rojo
    • 1 zanahoria

Si vas a cocer los garbanzos, déjalos en remojo la noche anterior, y cuécelos en la olla rápida durante unos 60 minutos. Comprueba que estén tiernos.

Pica fina la cebolla y los pimientos. Ponlos a sofreir con un chorro generoso de aceite de oliva. Añade los ajos picados muy finitos. Cuando la cebolla empiece a estar transparente añade la zanahoria picada fina.

Déjalo sofreir un buen rato a temperatura media, removiendo de vez en cuando, hasta que la cebolla empiece a pocharse (a aparecer los tonos marrones; no te preocupes, no se quema, cuando absorba un poco de líquido volverá a ponerse transparente).

Añade los garbanzos cocidos y remueve todo, dejando que los garbanzos se mezclen con el resto de ingredientes y se calienten. Incluye un poco del liquido de la cocción para que la cebolla lo pueda absorber.

Espolvorea un par de pellizcos de sal, al gusto, y remueve.

Sirve y disfruta, como entrada o acompañamiento de carnes o pescados.

 

Receta de Hummus

El hummus es un plato árabe hecho a base de puré de garbanzos (hummus significa garbanzo en árabe). Aunque tiene otros usos, nosotros fundamentalmente lo usamos para dippear. Lo puedes usar también como salsa -viscosa-, acompañando a carnes, pescados o verduras, p.e. en sustitución de una mayonesa.

Ingredientes

    • Garbanzos cocidos (200gr de garbanzos secos, o unos 500 ml de garbanzos cocidos)
    • 1/2 a 1 diente de ajo (pequeño, no te pases)
    • 1  cucharadita de comino en polvo, al gusto
    • 3 cucharadas de aceite
    • Salsa de tahini (si no tienes, unas tres cucharaditas de semillas de sésamo -ajonjolí- y un chorrito de zumo de limón)
    • [Opcional] media cucharadita de pimentón dulce
    • Un poco del agua de cocción de los garbanzos (agua normal si no la tienes)
    • Un poco de sal, al gusto

Para adornar la superficie

    • Un poco más de pimentón dulce
    • Aceite de oliva

Para poder picar

    • Un par de zanahorias, apio, unos colines o unos nachos. También se puede tomar con pan de pita

Si te han sobrado unos garbanzos de un cocido puedes elegir entre hacer ropa vieja (con el resto de ingredientes que te sobraron del cocido) o usarlos para hacer un hummus.

Si no vienen de un cocido necesitará cocer unos garbanzos (unos 200 gr de garbanzo seco, los dejas en remojo y al día siguiente los metes en la olla rápida, entre 40 y 60 minutos) o comprarlos ya cocidos. Guarda un poco del líquido, porque te hará falta después

La elaboración del hummus es muy sencilla: pones en el vaso de la minipimer los garbanzos (que ocupen unos 500 ml), 1 diente de ajo (pequeño), 1 o 2 cucharaditas de comino en polvo, 3 cucharadas de aceite de oliva, 2 cucharadas de salsa de tahini (o si no tienes, unas tres cucharaditas de semillas de sésamo -ajonjolí- y un chorrito de zumo de limón) y un poco de sal. Opcionalmente puedes añadir media cucharadita de pimentón dulce.

Tritura bien todo (se te quedará muy espeso y se hará difícil pasarlo, así es que hecha un poco del caldo de los garbanzos según lo vayas necesitando -si no tienes, un poco de agua-, lo justo para que la minipimer pueda hacer su trabajo, no debe quedar líquido, sino algo viscoso).

Una vez triturado, pásalo a un bol, esparce un poco de pimentón por encima y échale aceite de oliva hasta formar una fina capa. Lo puedes alisar con la cuchara para que se mezclen el aceite con el pimentón dándole al hummus su color característico en la superficie.

Coge unas cuantas zanahorias (también puedes usar en su lugar apio, colines de pan o nachos), pélalas y córtalas en trozos de unos 6 cm y cada uno de ellos en tiras (suficientemente gruesas para que sean firmes, pero intentando que no lo sean demasiado para que no quiten demasiado sabor al hummus -unas 6 tiras de cada trozo de zanahoria-).

Coloca las zanahorias en un vaso corto y sírvelas con el hummus. Disfrutadlo.